En el pasado, la población de Ranadi había invitado a algunas órdenes religiosas a su aldea, sobre todo porque estaban ansiosos para recibir la Eucaristía. El P. Srimal Priyanga, salesiano, director del Instituto Técnico “Don Bosco”, fue uno de los contactados.

En el último mes de agosto, el P. Priyanga, junto con el P. Alfred Maravilla, Superior de la Visitaduría Salesiana de Papúa Nueva Guinea y las Islas Salomón (PGS), visitaron el vertedero para ver la situación de las personas y la forma en que viven, y se han reunido con el líder de la comunidad.

Lo que vieron no los dejó indiferentes a los dos Salesianos de Don Bosco. “El olor y la miseria de ese lugar eran repugnantes – dijo el P. Priyanga – Esta visita, que va más allá de las fronteras de nuestra institución desea tocar las vidas de quienes nos rodean, nos ha abierto los ojos”.

El Superior P. Maravilla, manifestó su total apoyo y alentó a la comunidad de Henderson para que examine la posibilidad de trabajar en medio de la gente de Ranadi, especialmente estar con los jóvenes de esta comunidad pobre y las comunidades adyacentes. “Vayan y examinen cómo pueden ayudar a esa personas pobres es una expresión muy concreta del espíritu misionero de Don Bosco al servicio de la comunidad”, manifestó el P. Maravilla.

En respuesta a este desafío planteado por la comunidad Ranadi, la comunidad de Henderson, acordó iniciar reuniones periódicas con los jóvenes y estudiar con la gente cómo podría intervenir la comunidad en diversos aspectos relacionados con la educación de los jóvenes, mejorar la salud de la población y desarrollar actividades oratorianas.

Los Salesianos de Henderson invitan a todos a ponerse al servicio de las familias vulnerables y llegar a todos los necesitados en cualquier situación o lugar en el que se encuentren.

Fuente: AustraLasia

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