Hoy 64 millones de los 1.800 millones de jóvenes de todo el mundo están desempleados, 24 millones no tienen acceso a formación, 145 millones de jóvenes son pobres y uno de cada diez vive en zonas de conflicto. A esta realidad se enfrentan los misioneros salesianos y su respuesta es un verdadero compromiso con la educación y la formación de los jóvenes para que tengan herramientas para salir de la pobreza y convertirse en agentes de desarrollo.
El 85% de los jóvenes que se forma en nuestros centros consigue empleo al final de curso.
Desde MISIONES SALESIANAS y JÓVENES Y DESARROLLO estamos comprometidos con el empleo de los jóvenes. Más de 200.000 jóvenes de todo el mundo reciben hoy formación en alguno de los centros salesianos de formación. Una formación de calidad que a un 85% les permite encontrar empleo tras finalizar sus estudios y “es más, el 65% de estos jóvenes sigue manteniendo su trabajo tras cuatro años”, explica José Antonio San Martín, director de MISIONES SALESIANAS.
“Está comprobado que un joven que recibe una formación de calidad consigue un mejor trabajo y tarda menos tiempo en encontrarlo”, añade Juan Linares, presidente de la organización JÓVENES Y DESARROLLO.
Ambas organizaciones trabajamos en proyectos de apoyo a los jóvenes para su formación o su capacitación profesional siguiendo la hoja de ruta marcada por los ODS de tener acceso a una educación de calidad (ODS4) y a un trabajo decente (ODS8).
En el Día Mundial de la Juventud, que se celebra hoy, lunes 12 de agosto, MISIONES SALESIANAS y JÓVENES Y DESARROLLO queremos reivindicar el papel fundamental de los jóvenes, la necesidad de que encuentren empleos con los que puedan vivir y pedimos a los Gobiernos un verdadero compromiso por los jóvenes.
