Por la primera vez en la historia, el pasado lunes 18 de noviembre fue presentado un importante estudio de las Naciones Unidas sobre el problema mundial de los 7,2 millones de menores privados de su libertad. Realizado gracias a la colaboración de muchos expertos, el estudio tiene como principal autor al estudioso austríaco de derechos humanos, el profesor Manfred Nowak.
Su compatriota Reinhard Heiserer, director de la ONG "Jugend Eine Welt - Don Bosco Aktion Austria", considerado el estudio como un instrumento extremadamente útil para convencer a las autoridades responsables que la detención de los niños debería ser permitida solamente en situaciones excepcionales y como última posibilidad, sosteniendo que normalmente los niños encarcelados tienen necesidad de mucha más atención y cuidado.
"Don Bosco mismo se preocupaba mucho de los jóvenes encarcelados. Podemos citar diversas historias que documentan su particular atención a este grupo vulnerable de jóvenes" afirmó.
El mensaje central del estudio global quiere incentivar a los Estados a que respeten mejor y protejan los derechos de los menores, reduciendo drásticamente el número de ellos que se encuentran privados de la libertad - en cualquier contexto estén: instituto de corrección, prisión, centro para los refugiados... - adoptando para ello todas las medidas alternativas que existan.
Durante la fase de investigación, la ONG "Jugend Eine Welt" invitó a diversos asociados al proyecto a compilar un cuestionario relativo a los niños de la calle que están en la cárcel. Entre los colaboradores se encuentra también don Jorge Crisafulli, director de "Don Bosco Fambul", ONG y obra salesiana, activa en Freetown, en Sierra Leona (un país en donde con frecuencia los menores son encarcelados junto a los adultos) con el cual la ONG austríaca había colaborado en el pasado, financiando un sistema de acumulación hídrica en el interior de la cárcel de Pademba.
El pasado miércoles 20 de noviembre, en ocasión de la Jornada Internacional de la Infancia, el estudio global de la ONU fue presentado en una conferencia de prensa en Viena, y en la ocasión el profesor Nowak afirmó: “Un solo niños detrás de las rejas ya sería demasiado”. El estudio ha relevado que los disturbios psiquiátricos de los niños detenidos pueden aumentar diez veces durante la reclusión, y una cuando vuelvan a la libertad, la detención estará relacionada con la muerte prematura de estos niños.
El estudio también reveló que en todo el mundo el porcentaje medio indica que los niños son encarcelados a una edad cada vez menor y que los períodos de detención aumentan.
