El sistema consiste en crear conjuntamente, gracias a la contribución de cada miembro, un ahorro solidario, para poder constituir un acceso comunitario al crédito para invertir en una actividad generadora de ingresos y mejorar las condiciones económicas.
Desde el anuncio de la pandemia en la provincia de Kivu del Sur, la gran mayoría de la población ha sufrido una fuerte desaceleración. Desde el 19 de marzo, las autoridades han impuesto el abandono de todas las actividades en las que participen más de 20 personas. Los grupos de “AVEC” también tuvieron que lidiar con la pandemia. Algunos comités han decidido suspender las actividades; otros han reducido el número de participantes en la reunión semanal para permitir que las actividades continúen, ya que estas asociaciones son un medio eficaz para que los miembros se preparen económicamente para un desastre como el ocasionado por el Covid-19.
Desafortunadamente, la mayoría de los miembros viven día a día, usando el dinero que reciben del grupo “AVEC” para actividades que les garantizan poco más que la supervivencia. En la actualidad, los miembros tienen dificultades para pagar sus créditos y dejar algo de lado. Algunos han suspendido las actividades generadoras de ingresos por razones de seguridad y han decidido no vender más en el mercado, aunque tengan créditos que pagar; otros dan prioridad a los gastos de alimentación.
Emblemática es la historia de Adidja Sikambwe, 53 años, miembro del grupo “AVEC” “Neema/AFDC”, que vende plátanos fritos en la calle Avenue Industrielle. Con el inicio de la pandemia, sus ingresos se han reducido drásticamente debido a la falta de clientes tras las medidas de confinamiento. Una vez se vio obligada a consumir sus bienes en la familia para no pudrirse. En la actualidad la actividad ya no es rentable y quisiera cambiarla, pero carece de medios. Debido a la situación, ya no puede pagar su crédito, ni puede ahorrar.
Si esta situación persiste, su pequeño negocio de plátanos fritos está en peligro de quiebra, porque en algún momento se verá obligada a utilizar todo su capital para satisfacer las necesidades alimentarias de su familia. Sin embargo, su capital proviene de un crédito contratado por 2 meses con el grupo “AVEC”.
La falta de pago del préstamo no permite a los miembros del comité tener los fondos para satisfacer las demandas de otros miembros necesitados de crédito, y esto podría llevar a la quiebra del grupo “AVEC”.