Kenia – La misión salesiana entre los refugiados de Kakuma

19 Enero 2022

(ANS - Kakuma) - A más de 830 km al noroeste de Nairobi se encuentra el campo de refugiados de Kakuma, el segundo más grande de África después del de Dadaab. El campamento se estableció en 1992 y actualmente acoge a unos 225.000 refugiados, la mitad de ellos niños y jóvenes, de países como Sudán, Sudán del Sur, Somalia, Congo, Ruanda y Burundi. Las historias de los refugiados son tristes, pero llenas de esperanza. Y a lo largo de los años, los salesianos han hecho una inmensa contribución al bienestar de ellos. De hecho, de todas las organizaciones (religiosas y laicas) que trabajan en el campamento, ellos son los únicos que residen dentro del mismo: la capacidad de los salesianos para identificarse con los refugiados les ha ganado la admiración y respeto, dentro y fuera del campamento.

Los Salesianos animan una gran variedad de actividades en el campo. Entre estos se destaca el servicio espiritual a los refugiados. En el campamento, los salesianos dirigen la única parroquia católica, dedicada a la Santa Cruz, que cuenta con diez estaciones misioneras repartidas en todo el campamento. Con la ayuda de dos sacerdotes jesuitas, la parroquia logra garantizar la Eucaristía en cada una de las estaciones todos los domingos. Además, el programa pastoral parroquial incluye con frecuencia seminarios y talleres para jóvenes.

Dado que la gran mayoría de los refugiados son niños y jóvenes, durante el 2014 los Salesianos crearon el “Savio Club” para facilitar la educación en la fe y el desarrollo personal de los “pequeños ángeles” del campamento. El Sr. Kelvin, catequista de la parroquia, observa: “Hay una diferencia increíble entre los niños que han pasado por el Savio Club y los demás. Son muy activos en la iglesia, están bien educados y también se desempeñan mejor en la escuela”. Cada año el Savio Club acompaña a unos mil menores.

Los salesianos también realizan un servicio de capellanía en varias escuelas del campamento, animando las actividades religiosas y ofreciendo cursos de catecismo.

Otro servicio importante de la misión salesiana en el lugar es ofrecer a los refugiados habilidades técnicas. Con la ayuda del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, los salesianos dirigen el  “Don Bosco Technical Institute”, que ofrece cursos de Albañilería, Electricidad y Energía Solar, Mecánica de Vehículos Motorizados, Hidráulica, Sastrería, Soldadura y Fabricación, Secretariado, Programas de informática y alfabetización. Y para aumentar la eficiencia y el acceso a la formación, los salesianos gestionan otros cuatro centros en todo el campamento que ofrecen los mismos servicios. En total, el centro da formación cada año a más de 3.000 alumnos: jóvenes que han recibido la oportunidad de ganarse la vida, tanto en el campamento como en sus países de origen y repatriación.

La comunidad hospedada en el campo de refugiados está formada por la población turkana, un pueblo básicamente nómada, dedicado al pastoreo, que se percibe a sí mismo como marginado por la sociedad keniana, con una tasa de alfabetización muy baja. Pensando en ellos, los salesianos decidieron crear un instituto técnico en la cercanía del campo, que ya hoy ofrece numerosos oficios (carpintería, albañilería, electricidad y energía solar, mecánica de vehículos a motor, cursos para instaladores y torneros, fontanería, soldadura y fabricación, informática, programas de alfabetización, contabilidad, etc...).

El instituto fue posible gracias al apoyo y  colaboración de numerosos actores internacionales: el Ministerio Federal Alemán para la Cooperación Económica y el Desarrollo (BMZ) y la Oficina de la Misión Salesiana en Bonn, la agencia eslovaca para el desarrollo internacional (Slovak Aid) y la ONG Salesiana “Savio”, sin olvidar el acompañamiento directo del Rector Mayor y de la Inspectoría de África Oriental (AFE). Además, la Oficina Misionera Salesiana de New Rochelle está apoyando la finalización y ampliación de las estructuras, especialmente las utilizadas para deportes, para permitir una gran cantidad de actividades de los oratorios. Mientras tanto, los Salesianos ya están animando el Centro Juvenil “Don Bosco”, con dos sedes, una en el centro principal y otra en el llamado complejo “Don Bosco 1”.

Entre los desafíos que enfrentan los salesianos en su misión entre los refugiados está, en primer lugar, la falta de personal. Dado que la misión salesiana se extiende por todo el campamento, las necesidades son realmente muchas y asegurar a los jóvenes refugiados “una presencia salesiana de calidad” no es fácil. En segundo lugar, está el tema de las estructuras: en 2020, por ejemplo, algunos laboratorios y aulas quedaron destruidos por inundaciones tras el derrumbe de las contenciones de algunos ríos.

A pesar de todo el celo de los salesianos por esta misión no disminuye lo más mínimo. Los hijos espirituales de Don Bosco del campamento y de toda la Inspectoría AFE están muy agradecidos a todos los bienhechores que continúan ayudando a esta hermosa misión a favor de los jóvenes más necesitados.

InfoANS

ANS - “Agencia iNfo Salesiana” - es un periódico plurisemanal telemático, órgano de comunicación de la Congregación Salesiana, inscrito en el Registro de la Prensa del Tribunal de Roma, Nº. 153/2007.

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