La comunidad Uai-Mori y la Familia Salesiana han acordado que el Santo Mártir Calisto Caravario -nacido en Italia, alumno del oratorio de Valdocco y asesinado en China- será el protector de la Comunidad Uai-Mori, para conmemorar la llegada de los primeros salesianos y de San Calisto Caravario a Timor Este, entre 1927 y 1929. La propuesta fue recibida con gran entusiasmo por los Exalumnos, quienes decidieron construir una nueva capilla, en el mismo estilo que la antigua iglesia de Dili utilizada por la primera comunidad salesiana (1927-1929), que acabó destruida durante la Segunda Guerra Mundial.

Así, el 27 de septiembre de 2020, el difunto obispo de la diócesis de Baucau, padre Basilio do Nascimento, dio su bendición para la fundación de esta capilla. El sitio, ubicado en Uaimori Tula, fue elegido por el padre Eligio Locatelli, uno de los pioneros salesianos. De hecho, Uaimori tiene su propia historia durante la larga lucha por la independencia de Timor Este.

Desde entonces, los Exalumnos han recaudado fondos y han contribuido con entusiasmo a la construcción de este nuevo templo, con un presupuesto estimado de aproximadamente $100,000. Las obras aún están a cargo de la Comisión Constructora de San Calixto Caravario de Uaimori, que el día de la inauguración las entregará a la comunidad católica de Uaimori, a través de la parroquia católica de Viqueque.

Este proyecto es otra acción concreta para reavivar el entusiasmo y el carisma salesiano, al acercarse la celebración del Centenario de la llegada de los Salesianos a Timor Este (1927-2027). Calisto Caravario, joven clérigo misionero formó parte de la primera comunidad salesiana en Timor Oriental (1927-1929).

Los Exalumnos de Timor Este, los "Antigos Alunos", merecen unas palabras de agradecimiento por su crecimiento dinámico, planificación, compromiso y colaboración. Están bien motivados y entusiasmados por el centenario que se acerca de la presencia de Don Bosco en su país (1927-2027) y por el acompañamiento de tantos carismáticos misioneros salesianos y salesianos timorenses, presentes desde los primeros días de la misión hasta hoy.

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