El sábado 8 julio: Después de una indicación se baja al patio. Los 370 jóvenes egipcianos que asisten a los cursos son llamados por su nombre y divididos por clases. Ellos escuchan la bienvenida del Director, el P. Pietro Bianchi, que los define: “libro blanco”, donde no es importante qué hicieron antes, sino la voluntad de ser buenos y mejores. Les indica que lo esencial en la vida es lo que uno quiere ser y cómo construir el futuro en la escuela de Don Bosco en El Cairo.
En las clases se comienza con el alfabeto. Repiten en voz alta, hacen ejercicios, y alguno de los jovenes quiere anticiparse a los ejercicios posteriores, indudablemente existe un deseo de aprender.
Los domingos, participan las mujeres en el centro salesiano a seguir un curso de educación y junto con los voluntarios de Caritas distribuyen ropa para los niños. Están sentadas en un círculo, hablan, sonríen, escuchan, comparten sus vidas en la sencillez... Además de ser un sitio educativo para las jóvenes, la casa salesiana también ofrece espacio educativo para sus familias.
El viernes, es el día sagrado para los musulmanes. La escuela termina al mediodía y los muchachos cristianos que se quedan en la escuela participan en un momento formativo. “¿Conocen a Don Bosco?”, - pregunta el P. Bianchi a los 150 estudiantes. Nadie lo conoce porque son ortodoxos.
El P. Bianchi comienza a hacer conocer la figura del Santo de los jóvenes. Les cuenta el sueño de nueve años, la apertura del Oratorio, la fundación de la Congregación, los primeros misioneros, los salesianos presentes en los 130 países.
Los muchachos han comprendido el significado de vivir en una familia, de pertenecer a una gran familia, donde la principal preocupación es la salvación de sus almas a través de la formación y del estudio, y con el deseo de construir un futuro mejor.
Esta experiencia fue un momento emocionante para los voluntarios. El director presentó a los muchachos las razones de cada uno de los voluntarios han llegado el verano a servir en la casa salesiana: el amor a los jóvenes con el estilo de Don Bosco.
Fuente: DonBosco.it
