El mensaje se divide en seis partes: la primera parte agradece las oraciones de todos los fieles. En la segunda habla de su primer éxodo de Japón a Argentina, junto con sus padres y hermanos. En la tercera parte describe su regreso a Japón. En la cuarta parte el prelado habla de su viaje para ser “un pastor con olor a oveja”. En la quinta sección habla sobre el “vasto, maravilloso y desconocido campo”, que es la diócesis de Saitama. Finalmente, en la sexta y última parte, subraya la importancia de vivir como testigos del Jesús resucitado.
“Como hizo el Papa Francisco en su primer saludo desde el balcón de San Pedro, en la tarde de la elección, yo también les pido a cada uno de ustedes que recen por mí y, por mi parte, les envío mi bendición”, escribe Mons. Yamanouchi.
“En la vida hay éxodos que marcan nuestra existencia. En mi caso, el primero fue en 1964, cuando tenía ocho años y medio y mis padres decidieron emigrar de Japón al otro lado del mundo, Argentina”, continúa.
En febrero de 1997, sin embargo, regresó a Japón. Mons. Yamanouchi dice que, en el momento de este segundo éxodo, tenía 42 años y era “un argentino con cara de japonés”. Después de un año en la prefectura de Oita, se preguntaba si no debía regresar a la Argentina y todos le respondían: “depende de usted".
Ahora, como obispo de Saitama, Mons. Mario Yamanouchi tiene ante sí una realidad variada. “En la diócesis hay 54 parroquias distribuidas en 11 zonas, con 51 sacerdotes y 5 diáconos permanentes. Tenemos 4 Congregaciones Religiosas masculinas y 17 Congregaciones Religiosas femeninas. Existen 19 jardines de infancia, 4 escuelas medias y superiores, 5 instalaciones de cuidado infantil y 2 hogares de ancianos. Mi deseo es visitar todas las parroquias y comunidades religiosas, no por correo electrónico, sino en persona”, ha escrito.
El mensaje termina con una invitación a vivir como testigos del Jesús resucitado, creando una comunidad atenta a los pobres y a los más necesitados.
Debido a la estructura multicultural de la diócesis, el mensaje se encuentra disponible en siete idiomas.
