El 24 de octubre de 2018 los salesianos de las dos inspectorías: África Occidental, lengua francesa (AFO) y la de lengua inglesa (AFW), abrieron en la diócesis de Banjul, Gambia (África Occidental) una presencia misionera en una de las zonas más pobres del país cuya mayor riqueza es su numerosísima juventud.
La aldea de ‘Kunkujang Mariama’ es la Sede Parroquial y es una presencia misionera muy reciente. De esta manera Gambia se convierte en el 136° país al cual la Congregación Salesiana va en misión para enriquecer el trabajo misionero con el estilo de Don Bosco: evangelizar educando y educar evangelizando. “Los salesianos, con el corazón y con un sistema preventivo, Don Bosco ha llegado a esta zona para quedarse con este pueblo y caminar juntos en la edificación de la Iglesia y de una sociedad más humana”, comenta el salesiano misionero P. Juan Carlos Valdiviezo.
Gambia es un país que vivió 22 años de dictadura bajo el régimen del ex-presidente Yaya Jameh. En enero del 2017 el país volvió a la democracia, una democracia todavía frágil y todavía en proceso de estabilización. La juventud es víctima de la pobreza económica, social y estructural, las oportunidades educativas y profesionales son muy escazas y la emigración ilegal se ha vuelto un mal endémico.
La presencia de los hijos de Don Bosco, en el poco tiempo desde su llegada está trayendo un nuevo viento de esperanza para la Iglesia de Banjul y para la sociedad gambiana. La experiencia en el campo educativo y la caridad pastoral de los salesianos es un regalo de Dios para estos jóvenes y para los mismos misioneros salesianos que comparten de este modo su peregrinación en la fe. “La presencia salesiana de ‘Kunkujang Mariama’ en Gambia lleva una marca especial por ser no solo internacional sino intercontinental pues somos cuatro salesianos: un polaco, un nigeriano, un indiano y un peruano”, comentan.
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