Partiendo del título de la Exhortación “Christus vivit”, ¿cómo crees que Cristo vive hoy en medio de los jóvenes contemporáneos?
En el capítulo cinco, el Papa Francisco se pregunta: ¿cómo está Dios presente en la historia? La respuesta es: a través de los jóvenes. A través de un joven que realmente lo ha conocido y lo trae al mundo, lo lleva a la escuela, a la universidad, a la política, a la vida social, al servicio de los más pequeños, de mil maneras. Así que yo diría esto: la presencia de Cristo en la historia pasa precisamente por la vida de los jóvenes. Este es el deseo del Papa.
¿Qué pensaría Don Bosco en vez de leer esta Exhortación Apostólica?
Debemos decir que Don Bosco está presente en la Exhortación. Al nombrar una serie de santos, el Papa Francisco se refiere a Domingo Savio y a su maestro Don Bosco. En una parte del documento, el Santo Padre pide que la Iglesia vuelva a llorar cuando vea las miserias de los jóvenes de hoy, cuando se constata un mundo globalizado y una cultura dominada por del descarte, por la cultura del abuso. En un momento dado pide directamente: “Hay que pedir el don de las lágrimas”. Y enseguida, personalmente, yo pienso en Don Bosco. ¿Qué hizo Don Bosco cuando salió de la cárcel de Turín cuando fue a visitar a los jóvenes? Salió con las lágrimas en los ojos. Don Bosco compartió la pasión del Papa Francisco. No es por nada que el Papa fue bautizado por un salesiano y tiene en su ADN la identidad salesiana.
¿Cómo cree que la Exhortación Apostólica será recibida por la Familia Salesiana en todo el mundo?
En primer lugar, quisiera reiterar que si en esta Exhortación buscamos respuestas preconcebidas nos sentiremos decepcionados. La invitación a trabajar juntos es fuerte. Debemos ser una comunidad que discierne, acompaña y esté dispuesta a ponerse en marcha.
La entrevista al P. Rossano Sala se encuentra disponible en ANSChannel.
