Print this page

Hungría – Entre el proyecto Europa y el “efecto Sandor”
Featured

18 Julio 2017

(ANS – Budapest) – “Hungría es actualmente la Inspectoría Salesiana más pequeña del mundo con solo 34 salesianos pero con un futuro brillante. Antes de que el régimen comunista asumiera el poder en 1948, la Inspectoría húngara tenía más de 200 miembros y muchos misioneros, e incluso algunos eran miembros del Consejo General. Durante 40 años de régimen totalitario se detuvo la promoción vocacional y el número de salesianos se redujo a unos 30. 

Desde el año 2004 el Rector Mayor envió un buen número de misioneros de la India, Polonia y Vietnam. Se abrieron algunas obras salesianas muy significativas y el flujo vocacional se recuperó recientemente.

El P. Geza Nadudvari, Ecónomo Inspectorial de Hungría, comparte lo que está sucediendo en el corazón del Viejo Continente de Europa en la actualidad:

“Nuestra presencia fue fundada en Hungría el año 1913, después de la obtención de la libertad en 1989. Como salesianos recuperamos algunas obras antiguas e infraestructuras pasadas, e iniciamos un trabajo maravilloso en Kazincbarcika. Esta maravillosa comunidad al este de Hungría es una de las regiones subdesarrolladas de nuestro país, la más afectada por el comunismo, y una de las comunidades más fuertes de los gitanos. En el corazón de la Europa moderna, los salesianos tenemos una misión importante.

Tengo el honor de ser el primer pionero húngaro en el lugar. El 2006 comenzamos una nueva comunidad con dos misioneros salesianos y en pocos años se convirtió en una misión maravillosa, con una escuela profesional enorme para los pobres, una parroquia y una escuela secundaria, y es ahora es la presencia salesiana más significativa en Hungría.

Se ha dado también una situación particular llamada “Efecto Sandor” sobre la vocación consagrada salesiana en nuestra Inspectoría, lo que llevó a la beatificación el 2013 del hermano salesiano, Stefano Sandor. En ese momento yo era el único coadjutor en Hungría y ésta vocación no atraía a los jóvenes, solo se consideraba la vocación al sacerdocio.

Hoy en día la figura del beato Sandor es ampliamente conocida entre los jóvenes y los que nunca han considerado la vocación sacerdotal, tal vez respondan voluntariamente al llamado de Dios y puedan sentir el llamado de ser salesianos coadjutores. Gracias a Dios tenemos al menos una llamada vocacional para la vida consagrada salesiana y estamos constantemente bendecidos con nuevos novicios salesianos.

La página Web de la Inspectoría de Hungría se encuentra disponible en: http://www.szaleziak.hu/

Fuente: Australasia

Este sitio utiliza cookies, para mejorar la experiencia del usuario y por motivos estadísticos. Al entrar en esta página declaro que estoy de acuerdo con el uso de cookies. para saber más o negarse a usar este servicio has clic en el botón "Más informaciones"