La parroquia dedicada a San Agustín en la comunidad de Dworzark es una de las más pobres de la Arquidiócesis de Freetown y los propios feligreses están haciendo grandes esfuerzos para completar el edificio. La iglesia aún necesita fondos para completar la última fase del proyecto, que incluye ventanas, puertas, pisos, pintura, trabajos hidráulicos y eléctricos.
La iglesia confiada a los salesianos da su servicio a más de 700 miembros de la comunidad católica de Dworzark y con la iglesia más grande, este número está destinado a crecer. Baste pensar que más de 150 jóvenes, acuden todos los días de lunes a sábado, al complejo parroquial para participar en las actividades del Centro Juvenil “Don Bosco”; y sin olvidar que el complejo parroquial también incluye dos escuelas: una primaria y una guardería.
“Agradecemos a nuestros benefactores -comentó el padre Gus Baek, Director de Misiones Salesianas- la financiación proporcionada hasta la fecha para la construcción de esta iglesia. Después de la construcción del edificio, los salesianos de Sierra Leona ahora necesitan financiación para completar las partes internas de la iglesia y hacerla operativa para la comunidad. Nuestros donantes son generosos y esperamos poder disponer pronto de los fondos para completar este proyecto”.
Los misioneros salesianos están activos en Sierra Leona desde el 2001, cuando comenzaron a trabajar para rehabilitar a los ex niños soldados a través de la organización "Don Bosco Fambul" con sede en la capital Freetown.
Hoy "Don Bosco Fambul" se ha convertido en una de las principales organizaciones involucradas en el cuidado infantil del país, ofreciendo nutrición, vestimenta, servicios de emergencia, vivienda y sobre todo, educación, rehabilitación y acompañamiento a largo plazo para los niños y jóvenes más necesitados.
La presencia salesiana se vuelve muy importante, en un contexto marcado por la pobreza crónica, el hambre generalizada y una tasa de analfabetismo aún muy alta.
Fuente: MissionNewswire
