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RMG – El padre Carbonell y el Sr. Borlengo descansen en paz

23 Abril 2021

(ANS - Roma) - Ayer jueves 22 de abril, dejaron la vida terrena e iniciaron la del cielo, dos salesianos muy apreciados y conocidos en buena parte de la gran Congregación Salesiana: el padre José Carbonell Llopis, 94, ex Inspector en España y Filipinas; y Cesare Borlengo, salesiano coadjutor de 86 años, humilde y amable hijo de Don Bosco, que tanto en el Piamonte como en la Sede Central Salesiana siempre ha hecho de la disponibilidad y del servicio realizado con una sonrisa, sus rasgos distintivos.

Don José Carbonell Llopis nació en Alcoy, Alicante, el 27 de marzo de 1927. Hizo el noviciado en Sant Vicenç del Horts, donde emitió sus primeros votos el 16 de agosto de 1946. Tras estudiar Filosofía en Turín-Rebaudengo (1946-50 ) realizó sus prácticas en Girona (1950-52), como asistente de los posnovicios, allí hizo su profesión perpetua el 21 de julio de 1951. Estudió Teología en Turín-Crocetta y obtuvo la licenciatura en Filosofía en el Ateneo Pontificio Salesiano. Fue ordenado sacerdote en la Basílica de María Auxiliadora de Turín el 1º de julio de 1956.

Posteriormente desarrolló su labor pastoral en Sant Vicenç dels Horts, donde fue Director (1959-1961);También Director del Noviciado y Filosofía de Godelleta (1961-64); Director de la Escuela Técnica "Doña Godina" de La Almunia (1970-72); Director de la Residencia "Don Bosco" en La Almunia (1972-75); ocupando además el cargo de Superior de la Inspectoría de Valencia en el sexenio 1964-70.

A los 48 años inició una segunda etapa de servicio apostólico, como misionero en Asia. Enviado a Filipinas, fue primero inspector (1975-81) y en este cargo aceptó las nuevas misiones salesianas en Papúa Nueva Guinea. Luego fue maestro de novicios y profesor de filosofía y teología (1981-85); también enviado a la entonces Visitaduría de Indonesia-Timor Oriental, donde pasó nada menos que 30 años (1985-2015), trabajando en las casas salesianas de Yakarta-Wisma (1985-1999 y 2012-15), Tigaraksa (1999-2006) y Sumba (2006-2012); además de ocupar los cargos de Delegado de la Visitaduría (1985-1998) y Ecónomo (2000-2006). Desde 2015 había regresado a su tierra natal, España y residía en El Campello.

Don Carbonell será recordado como un gran salesiano, apasionado, enamorado de la Congregación, emprendedor, optimista y alegre.

El señor Cesare Borlengo nació en Vezza d’Alba, en la zona de Cuneo, el 15 de noviembre de 1934 y entró entre los salesianos en el noviciado de Chieri el 15 de agosto de 1951; hizo su primera profesión el 16 de agosto de 1952 y su profesión perpetua, en el Colle Don Bosco, el 21 de julio de 1958.

Activo y celoso coadjutor, sirvió en las casas salesianas de la entonces Inspectoría Central, con sede en Turín, en  Cumiana y Casalette. Durante 25 años fue una figura conocida y benévola para todos los salesianos residentes o en tránsito en la Sede Central Salesiana, donde, con su estilo habitual imbuido de amor salesiano, se ocupaba incansablemente de los trabajos más dispares, incluso ante el aumentar de los obstáculos que avanzan, debido a problemas de salud y avanzada edad.

Como de Don Bosco, se puede decir de él que fue “un hombre profundamente rico en las virtudes de su gente; profundamente un hombre de Dios”.

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