Organizada bajo la supervisión del padre Prosper Paluku, SDB, responsable de Comunicación Social para la Delegación “San José”, la sesión se articuló en torno a varios módulos: la Comunicación Social al servicio de la misión salesiana; introducción al periodismo: el ABC del periodismo; técnicas de redacción periodística; introducción al fact-checking; el código ético del periodista; el uso de los programas de oficina de Google.
Tres formadores – Bonny Maheshe, Fidèle Kitsa y Patient Paluku – dinamizaron los talleres, fomentando una participación activa y práctica.
Una visión salesiana de la comunicación social
Uno de los momentos más intensos de la formación fue el desarrollo del primer módulo: “La comunicación social al servicio de la misión salesiana”. El formador Bonny Maheshe recordó que en la visión educativa de san Juan Bosco la comunicación social ocupa un lugar central. Más que un simple instrumento, es un medio de educación, de evangelización y de participación activa de los jóvenes en la vida de la Iglesia y de la sociedad; permite crear vínculos, valorizar los talentos y dar voz a los jóvenes para que se conviertan en actores y testigos de su propia realidad; da a los jóvenes una voz, visibilidad y un papel activo en la transformación de su entorno.
Una conclusión marcada por un llamado a la comunión
La formación concluyó el miércoles 4 de junio con una celebración eucarística presidida por el padre Paluku, quien en su homilía subrayó el vínculo esencial entre comunicación y comunión. “No puedo vivir en comunión con Dios si no estoy en comunión con mis hermanos, mis hermanas, las personas que me rodean. Y esta comunión pasa por la comunicación”, afirmó el salesiano.
Insistiendo en la finalidad profunda de la comunicación, el padre Paluku exhortó a los jóvenes a convertirse en constructores de unidad, afirmando que una información bien transmitida nunca tiene como objetivo dividir, sino unir. Para el responsable de Comunicación Social de la Delegación, la comunicación social es un instrumento de paz, reconciliación y solidaridad, especialmente valioso en un contexto donde las tensiones y las fracturas sociales son frecuentes. “La comunicación social, cuando está bien desarrollada, se convierte en semilla de esperanza en nuestras comunidades. Une, ilumina, transforma”, concluyó.
Un compromiso colectivo por un futuro en la comunicación
A modo de conclusión, los jóvenes participantes expresaron su gratitud a la Subcomisión de Comunicación Social. En una declaración común, se comprometieron a poner en práctica los resultados de la formación para una comunicación viva y al servicio de la comunidad salesiana y más allá. “Prometemos poner en práctica lo aprendido durante esta sesión, para una comunicación social viva, al servicio de nuestras comunidades salesianas y también más allá”, declararon los jóvenes en sus palabras de agradecimiento, testimoniando cómo desean ser tanto narradores como actores del cambio en sus respectivos entornos.
La sesión formativa terminó en un ambiente cálido, caracterizado por la entrega de los certificados de participación, seguida de una sesión fotográfica.
JAMBO VIJANA,
Magazine de la AFC-EST