El 11 de noviembre de 1875, en Turín-Valdocco, los primeros diez misioneros salesianos recibieron de padre Juan Bosco el mandato de iniciar una nueva aventura como misioneros. Aquellos mismos misioneros, en los días siguientes, partieron del puerto de Génova: el destino elegido fue Argentina, la Tierra del Fuego, y uno de los primeros consejos dados por el santo sacerdote fue “interesarse y acompañar a los hijos de los emigrantes italianos”, que ya entonces eran más de treinta mil.
El miércoles 12 de noviembre de 2025, en Génova, en el marco de las celebraciones, estarán presentes los nuevos misioneros que habrán recibido la Cruz Misionera el día anterior en la Basílica de María Auxiliadora en Turín, acompañados por el XI Sucesor de Don Bosco, el Rector Mayor, padre Fabio Attard, por la Madre General de las Hijas de María Auxiliadora, madre Chiara Cazzuola, por los animadores misioneros, salesianos de todo el mundo, jóvenes y miembros de la Familia Salesiana.
El programa de la conmemoración en Génova prevé:
- Lunes 10 de noviembre, a las 20:30 (UTC+1), la proyección de algunos documentales misioneros en el cine “Don Bosco” – “Club Amigos del Cine” de Génova Sampierdarena;
- Martes 11 de noviembre, a las 20:30, la vigilia misionera de oración con intermedios musicales del maestro Stefano Mhanna, en la iglesia “Don Bosco-San Gaetano” de Génova Sampierdarena;
- Miércoles 12 de noviembre, a las 9:30, en el Puerto Antiguo, la llegada de los misioneros; a las 10:00, el recorrido en barco hasta la Linterna, con la presencia del padre Attard y de la madre Chiara Cazzuola; a las 11:15, la inauguración de una lápida conmemorativa en el Puerto Antiguo; a las 12:00, la acogida en el “Don Bosco” de Génova-Sampierdarena por parte de los jóvenes; a las 12:30, la misa en la parroquia y, a continuación, la inauguración del Museo de las Expediciones Misioneras.
Una vez inaugurado, el museo quedará abierto a quienes deseen visitarlo, comunicando la visita al Instituto (teléfono 010 6402601).
“Nos sentimos honrados, como Obra de Génova Sampierdarena, de acoger a los responsables de la Congregación Salesiana junto con los nuevos y valientes misioneros, porque son para nosotros un ejemplo y un estímulo para hacer de nuestra vida un don de amor –subraya el padre Sergio Pellini, director de la obra de Génova-Sampierdarena–. El año 2025 marca el 150º aniversario de la Primera Expedición Misionera Salesiana, un acontecimiento importante para la Familia Salesiana. El 11 de noviembre de 1875, Don Bosco despidió a los primeros diez hermanos que partían hacia Argentina, dando inicio a una tradición misionera que ha llevado a los salesianos a cieno treinta y siete países del mundo”.
“Este aniversario –concluye el padre Pellini– representa una oportunidad para renovar el impulso misionero y el compromiso de vivir el carisma salesiano con creatividad y valentía. Con estas jornadas se pretende renovar la sensibilidad misionera de los salesianos y de los laicos, promover el compromiso en favor de los jóvenes más pobres y necesitados y celebrar la historia y el carisma salesiano”.
En 1872, san Juan Bosco dio inicio a la obra que hoy es el Instituto “Don Bosco” de Génova-Sampierdarena. Hablar de esta obra es hablar de la vida y de la historia no solo de un barrio, sino de toda una ciudad, que se ha revelado una elección acertada para la Congregación por su vocación obrera e industrial. De hecho, desde hace ciento cincuenta años, el Don Bosco ha vivido en simbiosis con Génova, que siempre ha mirado con gran interés y afecto el esfuerzo de los salesianos por garantizar un ambiente sereno, hecho de aliento, confianza y protagonismo juvenil: un sistema educativo que desarrolla toda la persona, favoreciendo el crecimiento y la libertad, creando situaciones y entornos positivos que estimulan y sostienen al joven, aportando calidad y compromiso a la vida.
Hoy, en el instituto salesiano de Génova-Sampierdarena, decenas de educadores se ponen cada día al servicio de unos doscientos alumnos de la escuela primaria y secundaria de primer grado, cuatrocientos cincuenta jóvenes de la formación profesional, doce chicos de la Comunidad Educativa Territorial (CET) y unos seiscientos jóvenes de las asociaciones deportivas que frecuentan el oratorio. Son jóvenes de unas treinta nacionalidades diferentes que, cada día, en el estudio, el juego y el trabajo, dialogan y se encuentran, enriqueciendo el tejido social del territorio de Génova.
En estos meses, como culminación de la obra, se ha creado el Museo de las Expediciones Misioneras, para ayudar a los visitantes a agradecer, reflexionar y reimpulsar la obra misionera.
