El Sr. Marino Bois y el Sr. James "Jim" Comino, ambos misioneros salesianos y Salesianos Coadjutores durante más de 30 años, primero en Corea del Sur, y luego en África Oriental, han realizado recientemente una visita a Juba, la capital del estado más joven del mundo. Han llegado a Sudán, y visitaron las presencias de la capital tanto en Jartum, y en El Obeid.
Los dos salesianos llegaron en visita a estas tierras, desgarradas por la guerra y la pobreza, para ver el estado de las escuelas rurales construidas gracias a las importantes contribuciones proporcionadas por benefactores de Corea del Sur, y al mismo tiempo, para traer una nueva ayuda puede para garantizar un mayor desarrollo y progreso. Las donaciones son el fruto del apoyo que se recolectó en las festividades por los 50° Aniversario del Centro Juvenil Don Bosco en Seúl.
Existe una gran necesidad de centros de formación que se dediquen a la educación y a la formación de los jóvenes en Sudán del Sur nos relata el Sr. Bois: “En realidad, la situación en Sudán del Sur, hoy en día, es realmente crítica. Desde la proclamación de la independencia en 2011 fue seguida por una serie de situaciones que han ocasionado guerra civil, y actualmente existen 3 millones de refugiados que huyeron a los países vecinos, como Uganda. Lamentablemente, con la guerra muchas escuelas fueron destruidas”.
Los salesianos no se quedaron de brazos cruzados y, además de trabajar con los refugiados en Sudán del Sur y actualmente en Uganda, han desarrollado en Juba, a orillas del Nilo, un gran complejo educativo, social y religioso con una Parroquia, una escuela y un centro de formación técnica.
“Continuamos orando por la paz y queremos detener la locura de esta larga y e insana guerra civil”, concluye el Sr. Bois.