El sábado pasado, 6 de octubre, Ausunta Juraluk Mayer, realizó su Primera Profesión en el Instituto de las Hijas de la Realeza de María Inmaculada (DQM, según las siglas en inglés). Las religiosas Maria Sarintip Kitsawat, ex responsable de la Comunicación Social Católica de Tailandia y Sabena Sujittra Saengdaeng, profesora de Fonética de “Holy Mary School” de Udon Thani, celebraron sus 25 años de fidelidad religiosa.
El servicio calificado, en los campos respectivos, de estas dos personas consagradas, es una expresión concreta del carisma del instituto, que lleva a sus miembros a vivir los tres consejos evangélicos de pobreza, castidad y obediencia dentro de la sociedad. Son la levadura en el mundo. Otras características del instituto son el espíritu de familia, que se basa en el modelo de la Sagrada Familia de Nazaret y en las enseñanzas de Don Bosco, y en la devoción a María Auxiliadora y la devoción a la Eucaristía.
La misión del instituto, desde el principio, fue renovar e incrementar el Reino de Dios a través de la oración y el compromiso en la sociedad, en particular a través de la catequesis y la evangelización de las familias y los jóvenes. Siguiendo las indicaciones de su fundadora, las Hijas de la Realeza de María creen que a través de los jóvenes es posible enviar el mensaje de amor del Evangelio a los padres, a otros jóvenes y a los adultos en general. Las mujeres consagradas, además de ofrecer su testimonio de la vida en Cristo, se comprometen a educar a los jóvenes para que se conviertan en buenos cristianos y honestos ciudadanos.
Actualmente, el instituto está difundido en 6 diócesis en toda Tailandia y tienen aproximadamente 40 miembros, entre la religiosas con Profesión perpetua y Profesión temporal.
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