A pocas semanas de la cita, el Sector de Pastoral Juvenil, que impulsó y coordinó toda la actividad y que acompaña diariamente el trabajo de las Obras y Servicios Sociales Salesianos, comparte las conclusiones obtenidas en esos cinco días, de intenso trabajo, gran participación y mucho empeño salesiano.
Para la Congregación Salesiana, el Congreso Internacional de Obras y Servicios Sociales Salesianos 2022 fue un evento verdaderamente mundial: tomaron parte una delegación de cada una de las 91 circunscripciones salesianas repartidas en 134 países del mundo, en total unos 300 participantes, laicos. personas y consagrados, activas en obras y servicios sociales.
Pero no es solo una cuestión de números: la calidad de las intervenciones propuestas, la riqueza y diversidad de los estímulos y puntos de vista ofrecidos, además de la profunda raíz salesiana de todo el programa de trabajo, han creado un ambiente capaz de recargar a todos los participantes en su compromiso cotidiano de servir a los primeros destinatarios de la misión salesiana: los jóvenes más pobres y necesitados.
Como testificó uno de los participantes, “en el Congreso encontré a gente maravillosa y escuché historias de chicos y chicas que me hicieron redescubrir el sentido de mi trabajo”.
Ahora, para no frustrar ese momento de gracia, sino fortalecerlo y hacerlo fecundo en su realización práctica, el Sector de la Pastoral Juvenil pone a disposición las conclusiones y palabras finales de la asamblea de Turín; teniendo conciencia, como afirma el padre Miguel Ángel García Morcuende, Consejero General para la Pastoral Juvenil, de que “la conclusión del Congreso es sólo el comienzo de un reto y compromiso a largo plazo en nuestra realidad”.
El documento está disponible en la parte inferior de la página en cinco idiomas: italiano, inglés, español, francés y portugués.
