Como gesto simbólico, el embajador de Francia en la República Centroafricana entregó dos llaves de madera a los directores de las dos comunidades de Damala y Galabadja. Las llaves fueron elaboradas por los estudiantes del “Institut Lemonnier”, la casa salesiana de Caen, y llevadas al lugar por el padre Xavier de Verchère, salesiano de Don Bosco, en representación de la “Fondation Don Bosco” de París, acompañado por Philippe Rolin y David Crepy, miembros del equipo del proyecto.
Y esto porque la operación está gestionada desde París por la “Fondation Don Bosco” de París, promovida y financiada por la Agencia Francesa para el Desarrollo (AFD), que forma parte del Ministerio Francés de Europa y Asuntos Exteriores (MEAE).
Pobreza
El octavo distrito de Bangui es uno de los más pobres de una de las capitales más pobres del continente africano. Los hospitales suelen estar lejos: las mujeres que dan a luz a menudo no tienen manera de llegar hasta ellos, y la mortalidad infantil es muy alta.
Aunque los edificios estaban listos, aún debían ser equipados. Por eso, la semana pasada llegó a Bangui, desde Francia, un contenedor cargado con equipos médicos: camas médicas, camillas, sillas de ruedas, armarios, mesas de exploración, además de dos incubadoras neonatales y una serie de otros equipos médicos, por un total de más de 100.000 euros en equipamiento.
Todos los equipos fueron financiados por la ONG canadiense “Collaboration Santé Internationale” (CSI), una organización acreditada por el Ministerio de Salud y Servicios Sociales (MSSS) para la recolección de material médico con fines humanitarios, cuyos equipos cumplen con los requisitos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por su parte, la colaboración salesiana también se amplió gracias a la intervención de Salesian Mission, la Procura Misionera Salesiana con sede en New Rochelle, Estados Unidos, que contribuyó con los gastos de envío.
El contenedor fue descargado en Damala,
el jueves 27 de marzo, después de que la aduana de la República Centroafricana retirara los sellos, con gran alegría del salesiano padre Alain Miafouna, por el dispensario de Galabadja, y del salesiano padre Serge Ondoua, por el dispensario de Damala.
Fuente: Don Bosco Aujourd’hui
