Aclamado por la gente como "apóstol de la paz", Monseñor Menamparampil declaró: "No es fácil describir lo que estoy haciendo. Ya he visitado Manipur dos veces, en dos expediciones de tres días cada una. He estado en las zonas de población kuki de Churachandpur y Kangpokpi, donde me he reunido con la gente refugiada en los campos de socorro; y también he estado en las zonas de población meitei, donde me he reunido con sus líderes".
Explicando el estilo operativo de su misión de paz, el prelado, a la venerable edad de ochenta y siete años, dijo: "Me acerqué a los líderes de ambos bandos abogando por la paz. Sobre todo me concentré en hablar con personas con gran capacidad de influencia: oficiales retirados, ministros e intelectuales con autoridad moral sobre sus comunidades. Y me reuní con líderes religiosos de ambos bandos".
Un signo tangible de los frutos de su misión fue la reunión de líderes religiosos del 5 de junio, durante la cual el prelado salesiano firmó un llamamiento interreligioso a la calma y al fin de la violencia, junto con 18 líderes religiosos de diferentes religiones y tradiciones.
Y mientras se prepara para una tercera visita en solitario, el Obispo Hijo de Don Bosco lamenta hoy: "Este esfuerzo debe continuar... En este momento, las emociones están a flor de piel, mientras los jóvenes siguen cometiendo actos de violencia".
"Los jóvenes armados toman sus propias decisiones. Y también es difícil para los mayores convencer a los jóvenes. La pérdida de vidas ha sido mayor", continúa el obispo, comentando la gravedad de la situación.
Con un suspiro, el obispo añade: 'No hay soluciones fáciles... Sigue habiendo serias dudas sobre las estrategias de los líderes políticos a nivel estatal y central'.
El conflicto étnico entre la comunidad meitei, predominantemente hindú, y los cristianos tribales se ha saldado con un centenar de víctimas, cientos de casas dañadas y el incendio de 142 pueblos, más de 400 iglesias y 83 instituciones eclesiásticas. Actualmente, más de 40 mil personas de distintas comunidades están refugiadas en 272 campos de socorro, incluidos varios salones comunitarios, en 13 distritos de Manipur.
En los últimos cuarenta años, el obispo Menamparampil ha llevado su misión de paz a los puntos conflictivos del noreste de la India. Su análisis de las cuestiones socioculturales y políticas ha desencadenado numerosos debates e iniciativas de paz concretas, por las que fue nominado para el Premio Nobel de la Paz en 2011.
