¿Puedes presentarte a los lectores de ANS?
Soy el padre Eustace Siame, de la generación de 1971, orgulloso de ser un salesiano de Don Bosco, originario de la dinámica Visitaduría ZMB, que reúne Zambia, Zimbabue, Malaui y Botsuana. Mi camino comenzó en Kasama, en Zambia, donde las Hijas de María Auxiliadora me inspiraron por primera vez a abrazar esta vocación, aunque en mi ciudad natal no estaban presentes los salesianos de Don Bosco.
Mi formación me llevó de Bauleni a Lusaka y a Moshi, en Tanzania, donde emití mi primera profesión en 1993 y mis votos perpetuos en 1999. Ordenado sacerdote en 2003, desempeñé el papel de decano académico, vicario parroquial, director de oratorio y director de escuela en varias comunidades de Zambia, Zimbabue y Tanzania. Ahora estoy concluyendo mi tesis de licenciatura en Filosofía Analítica en la Universidad Pontificia Salesiana de Roma, impulsado por la pasión de servir e inspirar.
¿Cómo comenzó tu proyecto “Daily Bread”?
Mi servicio pastoral “Daily Bread” (Pan Cotidiano) nace de un profundo deseo de compartir la Palabra de Dios. Cuando me trasladé a Hwange, en Zimbabue, en 2010, empecé a publicar reflexiones dominicales en Facebook, alcanzando muchos corazones deseosos de alimento espiritual. Con la llegada de WhatsApp en 2011 –gracias a un consejo de mi secretaria universitaria– abracé esta nueva plataforma, inspirado por el lema de mi ordenación diaconal, una cita de san Pablo: “¡Ay de mí si no anuncio el Evangelio!” (1Cor., 9,16). Alimentado por la fe y por el Espíritu Santo, este ministerio ha florecido en un movimiento global, que ahora toca a más de cinco millones de vidas.
¿Qué te impulsa a seguir adelante y cómo eres apoyado en este camino de evangelización digital?
¡Mi pasión inquebrantable por la Palabra de Dios y el espíritu de Don Bosco son mis fuerzas motrices! Compartir los mensajes de la “Buenas noches salesiana” con el mundo me llena de alegría y de sentido. Hace dos años, con la aprobación de mi superior inspectorial y un entusiasta informe del padre Václav Klement, ya Consejero para las Misiones, mi servicio con Daily Bread fue oficialmente reconocido entre los servicios pastorales de mi Visitaduría. Y tuve el honor de ser nombrado delegado para la “Daily Bread Family”: una comunidad unida por la fe y por el poder transformador de la Palabra de Dios. Nuestra familia hoy abraza todos los continentes y nuestro sueño es que este servicio se convierta en una parte preciosa de la Familia Salesiana en todo el mundo.
¿Cuál es tu sueño, o tu deseo, respecto de la presencia de los salesianos de Don Bosco en el continente digital?
Mi mayor deseo es que los salesianos de Don Bosco abracen con valentía el continente digital con el mismo fuego y entusiasmo que tenía Don Bosco. Los jóvenes de hoy viven en el mundo digital y buscan conexiones e inspiración en las redes sociales. ¡Debemos encontrarlos donde están, capturando su atención y sus corazones con un compromiso significativo! El mundo ha cambiado: la televisión ya no está en el centro de la atención; es el smartphone el que abre la puerta de acceso a sus almas.
¿Tienes alguna sugerencia o idea que quieras compartir?
Si queremos realmente inspirar nuevas vocaciones salesianas, los medios digitales son nuestro camino. He visto a innumerables jóvenes descubrir a los salesianos de Don Bosco a través del servicio de Daily Bread. Cada día hay doscientos cincuenta apasionados administradores voluntarios que me ayudan a compartir la Palabra de Dios y los reconfortantes mensajes de las “buenas noches”, y así, todos juntos, podemos generar una ola de esperanza y de fe en todo el mundo.
